La ONU en su Declaración Universal de los Derechos Humanos establece que toda persona tiene los mismos derechos y libertades, sin distinción alguna de cualquier otra condición. Sin embargo, ser lesbiana, gay, bisexual o transexual (LGTB) puede suponer la pena de muerte en Mauritania, Sudán, Arabia Saudita, Yemen e Irán y en regiones de Nigeria y Somalia.
En Uganda existe un proyecto de ley para castigar la homosexualidad con la pena de muerte. Además, se propone la cadena perpetua para aquellas personas declaradas culpables de tocar a otra persona de su mismo sexo con la intención de cometer un acto de homosexualidad. A través de la presión internacional y de las organizaciones locales se ha conseguido paralizar, al menos por el momento.
(situarse sobre los países para ver más información)